Se llamaba Pepin Conde…. Pepillo era el cofrade que encontrabamos en ocasiones contadas , aunque solo en ocasiones de “foto” como digo yo…. Si, si esas ocasiones especiales como pueden ser salidas extraordinarias, cultos extraordinarios y eventos varios..
Pepin se daba mucho golpe de pecho cuando hablaba de su hermandad, lo cierto es que aparecía por ella en ocasiones contadas, sólo para lucir chaqueta, ó hacer alarde de su “estatus social”. Solía arrimarse a los cargos de la hermandad por tal de aparentar incluso para manejar a su antojo varias situaciones … lo unico que generaba a los demás cofrades era tírria, llegaba a tal punto de resultar pesado en alabanzas a sus titulares ó por otra parte con su prepotencia genuína despotricando de todo lo que le rodeaba sin dejar titere con cabeza.
La lastima es que personas de esta calaña estén admiradas y reconocidas como “cofrades de honor” cuando lo único que hacen es dañar este ambiente.
La honestidad y la humildad es por donde se debe vestir un hombre… las sobervias dejemoslas aparcadas.
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